La falcata es una espada de filo curvado originaria de la Iberia prerromana. La empuñadura es pequeña y de una sola mano y está desplazada hacia un lado respecto al eje dela espada. Su uso está históricamente asociado con las poblaciones íberas y celtiberas, donde constituye una de las armas blancas nativas más emblemáticas de la Antigüedad.
La calidad del hierro que servía para la construcción de las armas hispánicas fue alabada por los cronistas romanos.
Como nota curiosa que refleja la efectividad de estas armas queda el hecho de que, tras las primeras batallas en la Península Ibérica, se dio la orden a las tropas romanas de reforzar con hierro los bordes de sus escudos, posiblemente para contrarrestar la potencia de corte de las falcatas, muy superior al de las espadas rectas y los sables.
Empuñadura de zamak acabada en plata con las cachas del puño en imitación a marfil.
Hoja de acero inoxidable 440
Longitud: 60 cm
Peso: 1,5 Kg.
Fabricada por Marto. Certificado de calidad y origen. Hecho en Toledo.